Esplendor en el nuevo mundo

Hola, Feli. En tiempos pasados, éramos conocidas. Hoy somos amigas. ¡Amigas de corazón! Hace tiempo me pediste que te escribiera algo. Ese día ya ha llegado. Hoy a parte de felicitarte, te digo que en mi espacio de amistad un hueco siempre tendrás. Yo cuando deletreo tu nombre pienso en la palabra felicidad. Esto es lo que yo siento cuando escribo tu nombre. ¡Felicidad! Por qué mi mente y mis manos han cumplido con lo que un día mi amiga me pidió. Valle por mi cumpleaños escríbeme algo. Esta petición para mi representa alegría y satisfacción. Así que felicidades amiga mía.

Los corazones sufren en todas las estaciones. Los pájaros vuelan con el frío y el calor. Y vosotros os convertisteis en ángeles para que el cielo brille tanto o más que el sol y las estrellas.

Arboles que crecen, en el cielo

Para mí el dos mil quince, fue el año de la niña bonita. A partir del dieciséis, el siglo veintiuno, crecerá a pasos agigantados y la niña bonita se hará tan mayor, que su rostro quedará en el olvido como muchos de nosotros. Sería bonito saber cuántos niños y niñas, tiene el año 2015. Ahora, comienza un nuevo ciclo de esta niña.

Me encanta la niña de los quince años. La primavera y las ventanas abiertas para que entre el sol, la luz de la luna y el brillo de las estrellas.